miércoles, 20 de agosto de 2008

Segun Clarin

"DEDICADO AL FUTURO CRACK El Kun Agüero metió dos goles en la victoria sobre Brasil y fue con dedicatoria incluida. Fue para su hijo, ese que está en la pancita de Gianina Maradona, la hija del más grande. ¡Lo que le espera a ese bebé si sale varón! Con la técnica del padre y del abuelo tenemos un crack seguro AGÜERO: "SIEMPRE SE SUEÑA CON COSAS ASÍ" El delantero, autor de dos goles en la victoria por 3-0 contra Brasil, aseguró que "había que ganar porque veníamos bien y hacerlo contra ellos nos da más confianza". Le agradeció al técnico Batista y habló sobre Nigeria, rival del sábado en la final de los Juegos Olímpicos: "Tendremos que correr el doble para poder derrotarlos". La noche de gloria para Sergio Agüero con la camiseta celeste y blanca llegó. Y fue contra Brasil en una semifinal de un Juego Olímpico. Con sus dos goles, Argentina ganó 3-0 y alcanzó la final en Beijing. "Siempre se sueña con cosas así y por suerte se me pudo dar justo contra Brasil", confesó el Kun, quien festejó los dos tantos con un dedo suyo en la boca y confirmó que espera un bebé con Gianina, la hija de Diego Maradona. "Lo del chupete es para el futuro que está por venir", afirmó. Agüero fue el último en irse del estadio de los Trabajadores porque tuvo que someterse al control antidoping. "Estaba caliente porque me tocó el doping y no pude festejar, escuchaba los gritos del vestuario y quería estar ahí. Por suerte sé que todos están tan contentos como yo", relató. El ex Independiente no había tenido un buen torneo y hasta hoy no tenía goles. "Estoy muy contento porque me bancó a muerte y le estoy muy agradecido por eso. Nos conocemos y por suerte le pude responder", dijo sobre el respaldo que tuvo el técnico Sergio Batista. Brasil quedó atrás y ahora esperan por Nigeria, que derrotó 4-1 a Bélgica. "Había que ganar porque veníamos bien y hacerlo frente a Brasil nos da más confianza para la final. Ahora tenemos un día más de descanso y esperemos poder aprovecharlo", agregó. El Kun, de buen humor, también habló de la presencia de Maradona en el estadio. "Vino a ver la selección, me vino a ver a mí. Después del partido con Holanda me dijo como tenía que haber definido y hablamos de cosas del juego". El sábado, a la 1 de la mañana (hora argentina) será la final en el Nido de los Pájaros. Nigeria será el rival, igual que en Atlanta 96. "Es un buen equipo y lo estuvimos mirando, juegan bien, corren bastante y seguro que en la final tendremos que correr el doble para poder ganar", sostuvo. El primer gol del Kun fue con el pecho. Y ahora, que es yerno de Maradona, dejó una frase para que quede: "Fue con el pecho de Dios". MARADONA: "ESTOY ORGULLOSO DE TENER UN YERNO QUE LE HACE GOLES A BRASIL" El Diez estuvo presente en el estadio y festejó el triunfo con el plantel argentino. Elogió a Agüero, novio de su hija Gianina, quien metió dos de los tantos. "Me comprometí con el Checho y con los muchachos, por estoy acá", afirmó. Diego Maradona lo vivió como un jugador más. Desde la tribuna, al lado de Julio Grondona, gritó los goles como si fuesen propios. "Estoy sereno por haberle ganado a Brasil y orgulloso de tener un yerno que le hace dos goles", afirmó el Diez, en relación a la brillante actuación de Sergio Agüero, el novio de su hija Gianina. Estuvo en el vestuario con el plantel después del 3-0, que le permitió a Argentina estar en la final de los Juegos Olímpicos. "Por ahí en otro momento no estaba comprometido con la Selección, pero ahora me comprometí con el Checho Batista y con los muchachos, por eso estoy acá", confesó. Maradona llegó para los cuartos de final y desde ahí que está al lado del equipo de fútbol y también de los otros deportes. "Los muchachos dieron todos, explotó el Kun, la rompió Riquelme, también Messi y tenemos un equipo que llega sólido a la final", opinó Diego. Sobre Brasil, dijo que "yo creo que ya no sorprende por ser tan defensivo y al final Argentina le ganó por la técnica y por la táctica, que los terminó por absorberlos a ellos". Y también habló de Nigeria, próximo rival del conjunto de Batista: "Está claro que Nigeria no es Brasil pero hay que respetarlos, porque por algo llegaron a la final". Maradona se llevó algunos regalos del vestuario: la camiseta de Riquelme y la cinta de capitán, y la casaca de Messi. El sábado estará en la tribuna, como un hincha más. “LA SELECCIÓN HUMILLÓ A BRASIL Y LLEGÓ A LA FINAL DE LOS JUEGOS“ En su mejor partido del torneo, goleó en Beijing al clásico rival por 3 a 0 con tantos de Agüero (2) y Riquelme de penal, todos en el segundo tiempo. El equipo de Batista impuso su contundencia en un encuentro que se presentaba muy cerrado hasta el primer gol. Buscará el sábado a la 1 ante Nigeria repetir el oro conseguido hace cuatro años en Atenas. El fútbol siempre da revancha. Y aunque digan que la venganza es un plato que se sirve frío, Brasil quedó bien calentito. Derrota en la final de la Copa América de Perú en 2004, derrota en la final de la Copa Confederaciones en 2005 y derrota en la final de la Copa América de Venezuela, el año pasado. Tres golpes durísimos para Argentina, un país y una Selección que respira fútbol. Todo llega. La semifinal en los Juegos Olímpicos se presentaba como una oportunidad única para el equipo que conduce Sergio Batista, y no la iba a desaprovechar. Argentina aplastó, humilló, vapuleó a Brasil por 3-0 en Shanghai y se clasificó para disputar el oro ante Nigeria, el sábado (desde la 1 en nuestro país), en el Nido de Pájaro. Pero sobre todo, ganó como quiere la gente: con coraje y buen juego. La primera etapa sirvió de estudio. Especulaciones, dudas, miedos... De ambos. La dupla Riquelme-Messi no pesaba. Porque Dunga otra vez designó una marca personal para Román. Lucas se pegó al diez de la camiseta del enganche argentino. Anderson y Marcelo se encargaban de rodear a la Pulga cada vez que el crack se tiró a la derecha. Por el lado de Brasil, Ronaldinho, muy estacionado en la banda izquierda, intentaba poner su talento a disposición de Sobis, que quedó muy solo arriba. Entre Mascherano, Zabaleta y Gago se lo comieron. Algunas alarmas que se encendieron. Las escaladas de Rafinha por la derecha ante la impotente marca de Di María y de Monzón. Y Sobis, que a pesar de su soledad, complicó al fondo argentino. Un desborde del lateral terminó con un centro atrás que el delantero de Betis no pudo definir de taco. Quedaba muy lejos Agüero en ese primer tiempo, aunque el Kun se las ingenió para generarse su propio espacio y rematar de zurda desviado, a los 10. La más clara en el primer tiempo. No claudicó nunca Riquelme en su intención de pisar la pelota y organizar el juego de Argentina. A pesar del molesto Lucas, la intención de atacar del equipo siempre pasó por el cerebro de Román. Pero el marcador se abrió por otros motivos. La presión de Gago y Mascherano dio resultado. Brasil perdía la pelota cerca de su arco. A los 7, el volante central del Real Madrid abrió para Di María. El zurdo sacó un zurdazo violento al área, mitad tiro al arco, mitad centro. Y ahí apareció el Kun Agüero para ponerle el pecho al balazo, para empujarla a la red y establecer el 1-0. Después del gol argentino, Dunga decidió reemplazar a Hernanes y a Sobis, en lugar de Alexandre Pato y Thiago Neves. Dos nombres que asustan. Pero más asustaron Pareja y Garay, que marcaron siempre con firmeza. También metieron miedo los dos volantes centrales argentinos, para recuperar y distribuir. Aniquilaron las pretensiones de Brasil a pesar de un tiro en el palo de Sobis y de un desborde de Rafinha. Siempre intentó jugar Argentina y Riquelme. Román jugó rápido un tiro libre sobre la izquierda con Messi. Quedó para Di María que se la devolvió a Messi. La Pulga encaró, juntó rivales y abrió hacia la derecha para Garay, que se quedó en el área. El central le dio fuerte y cruzado. Otra vez Agüero, bien ubicado, llegó al corazón del área y anta la mirada estéril del arquero Renán, la empujó al gol para el 2-0. La desesperación de Brasil lo hizo salir del fondo en busca del descuento. Ronaldinho estrelló un tiro libre en el palo derecho de Romero (lo único que hizo el nuevo jugador del Milan), en el rebote Marcelo le dio al arco y Pato la desvió al gol. Pero la jugada fue anulada por el árbitro uruguayo Martín Vázquez. A partir de ahí, la pelota siempre se movió bajo la suela de Riquelme. El enganche no tuvo demasiado peso en ofensiva. Pero manejó los tiempos, bancó con aplomo las patadas y el asedio desesperado de Brasil por recuperar rápido la pelota e ir por el milagro. Ordena, acomoda, le dio aire al equipo... Y como en el último Superclásico y su recordado tiro libre, ahora de lateral generó su gol. Defendió la pelota sobre la derecha, ganó el saque de banda. Mientras charlaba con el asistente, armaba la ofensiva. Hizo el saque para Messi que encaró hacia el medio y tocó para Agüero en el área. Breno lo bajó y fue penal. Riquelme se hizo cargo y puso el 3-0 con autoridad. Después, Brasil se descontroló. Lucas primero y Thiago Neves después, castigaron a Mascherano y vieron la roja para que el equipo de Dunga demostrara aún más la superioridad Argentina. Un triunfo impecable de Argentina. Para tomarse revancha, para gozar al clásico rival, para disfrutar. Ahora se viene otra parada brava y otra oportunidad de borrar con el codo la tristeza del pasado. Nigeria será el rival en la final del sábado, ese mismo equipo africano que en Atlanta 96' le robó el oro a Argentina. Es hora de >recuperar y de defender lo propio.

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