lunes, 15 de diciembre de 2008

Lograron triunfo

Con un gol de Maxi y otro del Kun el Atletico logró la victoria que lo dejo quinto en la tabla.

Vuelvan a mirar la clasificación. Sí, sí, no es un sueño. Es la dulce y grandiosa realidad para cualquier rojiblanco que se precie. Hoy toca presumir y sacar pecho gracias a este Atlético, que en su frenética carrera para recuperar la zona Champions en Navidad se ha propuesto añadir más alegrías a su afición. El pack que el equipo colchonero ofreció ayer ante el Betis fue completísimo. Tercer triunfo consecutivo en la jornada número catorce sin perder, goles de Kun y Maxi para calentar al personal y la mejor resaca posible: superar al Real Madrid en la clasificación. El Atlético se mantiene firme, con algunos problemas como ayer ante el Betis, pero sacando adelante sus compromisos. Y eso es lo que cuenta. Los de Aguirre se conjuraron para sumar los tres últimos puntos del año en el Calderón y a fe que lo hicieron. Tuvieron que trabajar mucho el triunfo porque el Betis no era la cenicienta y porque el frío helador de la noche, el desacierto de algunos y la desconexión habitual parecían querer impedir que el Atleti sacara provecho otra jornada más. Pero lo hizo. El partido tenía truco, aunque pronto se lo encontró Agüero que empezó bailando a la zaga bética cayendo por una banda o por otra. Maxi avisó gracias a una de las trastadas del Kun, pero Casto desbarató ésa y otras ocasiones más. El partido lo desatascó Maniche con un gran pase por encima de la defensa que recogió Maxi para fusilar al meta verdiblanco. El partido se puso de cara y el Atleti comenzó su habitual festival en el que Forlán no estuvo tan certero, Simão desgarró con sus entradas por banda, pero donde Maxi, Maniche y el Kun llevaron el mayor peso ante un Betis donde Emaná brillaba por su ausencia. La reanudación mostró el mismo interés colchonero por buscar la portería de Casto aunque el Betis pareció desquitarse del yugo que le oprimía. Emaná despertó, Juanma puso a prueba a un acertado LeoFranco y la incertidumbre se adueñó de un Calderón con más público del esperado por la insoportable temperatura. El Atlético bajó el pistón y perdió el mediocampo. Aguirre propuso soluciones con Raúl García, mientras Chaparro quería encontrar el camino del empate. Lo buscaron sus jugadores justo cuando los pitos de la grada censuraban el conformismo rojiblanco. Sin embargo, y cuando el choque se metía en terreno peligroso, apareció Agüero para matar el partido. Una fulgurante contra rematada por Kun elevó al Atlético por encima del Madrid.

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