Se humilla y se aleja.

El Racing de Santander goleó al Atlético de Madrid (5-1)en El Sardinero tras una primera mitad en la que los cántabros dejaron prácticamente sentenciado el partido con un rotundo 3-0, que parecía entrar en él con el gol de penalti de Forlán pero Munitis y Zigic se encargaron de cerrar la goleada ante los cántabros. No obstante, tras el descanso el técnico rojiblanco dio entrada a Éver Banega y Maxi Rodríguez por Raúl García y Sinama-Pongolle y el equipo pareció que iba a dar otra imagen. Ya en el minuto 47, Antonio López hizo intervenir a Toño. Poco después, llegó la esperanza rojiblanca. Agüero se metió en el área y fue objeto de penalti. Forlán, fiel a su cita con el gol y más contra uno de sus mejores clientes, el Racing, marcó el gol que podía meter al equipo en el partido a falta de media hora para el final.

Malísima noche para un Atlético que perdió una de las siete finales que quedaban para acabar el Campeonato y ahora habrá que centrarse en las seis que restan para luchar por un puesto europeo. El domingo llega el Sporting al Vicente Calderón en otro partido vital para los rojiblancos.